Un grupo de 399 padres de familia del Centro Educativo Pytyvõ (CEP) presentó una solicitud formal a la Junta de Vigilancia de la Cooperativa San Lorenzo, exigiendo explicaciones sobre los recurrentes aumentos en los costos educativos. Según los denunciantes, estos incrementos contradicen la naturaleza sin fines de lucro de la institución.
Exigen transparencia en costos y gestión
Los padres piden una revisión integral de las matrículas y cuotas previstas para el año lectivo 2025. Como socios de la cooperativa y padres de alumnos, también solicitan información detallada sobre el costo que representa el CEP para la cooperativa, exigiendo un enfoque de austeridad. Critican que, como ocurrió en 2023, los gastos excesivos impacten directamente en los bolsillos de las familias.
Entre las áreas señaladas para revisión figuran:
- Sueldos y jornales del personal del CEP.
- Incentivos, obsequios de fin de año y vacaciones del personal.
- Gastos de limpieza, seguridad, vigilancia y mantenimiento de instalaciones.
- Otros costos variables, comparando cifras de los últimos tres años.
«El costo educativo actual del CEP prácticamente se equipara al de colegios privados de renombre que, a diferencia de este, sí buscan lucro», señala el documento presentado.
Uso de instalaciones y cargos adicionales
Otro reclamo apunta al manejo de las instalaciones deportivas. Los padres critican que, aunque todos los socios de la cooperativa pagan mensualmente el mantenimiento de estas áreas, las mismas también se alquilan a terceros y los alumnos deben abonar matrículas adicionales por cada especialidad deportiva.
“Queremos la mejor educación, no la mejor decoración ni la remera más costosa”, manifiestan en la nota, donde también denuncian constantes pedidos de colaboración. Entre los gastos adicionales mencionan la compra de uniformes, costos de decoraciones para eventos como el Día del Niño, Día del Maestro y San Juan, además de torneos intercolegiales.
Inicio de clases y planificación deficiente
Los padres también cuestionan el inicio anticipado de clases en febrero. Alegan que, durante ese mes, las actividades se limitan a repasos del año anterior y que en el tercer ciclo no se define un horario fijo para las materias ni la disponibilidad de profesores. Esto, sumado al ausentismo típico de las vacaciones, les hace pensar que el único propósito de adelantar el calendario escolar es cobrar la primera cuota del año lectivo.
Un llamado a respetar la esencia cooperativa
La solicitud, respaldada por 399 firmas, exige a los directivos de la cooperativa cumplir con los principios de una institución sin fines de lucro y priorizar la calidad educativa sin sobrecargar a las familias. Según los padres, cada vez más socios se suman al movimiento buscando mayor atención y transparencia en la gestión del CEP.