El Día Mundial del Alzheimer, que se celebra cada 21 de septiembre, busca generar conciencia sobre una enfermedad que afecta a millones de personas y familias en todo el mundo. De los más de 55 millones de personas que viven con demencia globalmente, entre el 60% y 70% de los casos se deben al Alzheimer, la forma más común de esta condición neurológica progresiva. Cada año se registran cerca de 10 millones de nuevos casos de demencia, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), lo que subraya la magnitud del desafío global que representa
Para los familiares de quienes padecen Alzheimer, el impacto emocional y físico es devastador. Conforme la enfermedad avanza, los pacientes pierden la capacidad de reconocer a sus seres queridos y realizar actividades cotidianas, lo que requiere cuidados constantes. De hecho, el 50% del costo global de la demencia, estimado en 1,3 billones de dólares, proviene del cuidado informal brindado principalmente por familiares.
La falta de una cura y el deterioro cognitivo progresivo que conlleva esta enfermedad agravan el sufrimiento tanto de los pacientes como de sus cuidadores, lo que hace urgente avanzar en la investigación y en políticas públicas que mejoren la atención y el apoyo a estas familias.