No cabe duda de que uno de los grandes retos pendientes en los alrededores del mercado central de San Lorenzo es la implementación de un sistema de estacionamiento adecuadamente controlado. Según ha informado la municipalidad, en los próximos días se pondrá en marcha una medida que limitará el estacionamiento de vehículos de menor porte a un máximo de dos horas sobre las calles Gral. Caballero y Sgto. Cándido Silva, en el tramo comprendido entre Tte. Benítez y San Lorenzo. Esta disposición tiene como objetivo principal convertir estas calles en áreas “exclusivas para clientes”.
Este cambio, si es que la SEÑORA CORRUPCIÓN no mete su mano, debería contribuir a una circulación más fluida y beneficiar a los permisionarios del mercado, quienes cumplen con el pago de sus cánones. Sin embargo, para que este plan no sea un simple “vyroreí” —una de esas medidas que se olvidan rápidamente—, es fundamental que el intendente Felipe Salomón designe a funcionarios responsables y honestos. De lo contrario, los «viejos zorros» del sistema no tardarán en convertir el estacionamiento controlado en una jugosa fuente de corrupción, transformando el ordenamiento en un verdadero ORDEÑAMIENTO de la billetera de los automovilistas.
Por ahí dicen que esta vez la coima no tendrá cabida gracias al sistema de control a implementar, que utilizará dispositivos electrónicos similares a los POS, que capturarán la imagen del vehículo, su chapa y la hora de estacionamiento. Pero esto es San Lorenzo, una ciudad donde la estructura de corrupción sigue gozando de buena salud desde hace décadas. Para que este sistema funcione, será fundamental contar con personal no solo capacitado, sino sobre todo honesto.
Cabe aclarar que, en realidad, el proyecto no solo contempla un estacionamiento controlado, sino también tarifado, y que el plan original abarca prácticamente todas las calles del centro de la ciudad. Sin embargo, en este contexto, las autoridades municipales aún deben aclarar Cabe agregar que, en realidad, el proyecto no solo contempla un estacionamiento controlado, sino también tarifado, y que el plan original abarca prácticamente todas las calles del centro de la ciudad. Sin embargo, en este contexto, las autoridades municipales aún deben aclarar ciertos puntos, como por ejemplo si las calles nombradas más arriba apenas serán el comienzo para luego expenderse a otras áreas del centro de la ciudad. Otro gran detalle es que se debe conocer desde cuando exactamente entrará en vigencia lo de las calles adyacentes al mercado
Ojalá el intendente tenga la firme voluntad de apoyar a los permisionarios del mercado y de designar personal municipal libre de sospechas de corrupción. Las evidencias —fotos, audios y videos— que han salido a la luz involucrando a funcionarios de la Dirección General de Tránsito Municipal en actos de cohecho son pruebas contundentes de la profundidad del problema. A pesar de ello, las altas autoridades de la municipalidad han preferido cerrar los ojos o simplemente ignorar los resultados de los sumarios prometidos, incluso cuando dichos escándalos se hicieron virales y llegaron a la prensa nacional.
Es crucial subrayar que, para evitar que el estacionamiento controlado se convierta en un ORDEÑAMIENTO más de los bolsillos de los conductores, será necesario que cada intento de coima sea denunciado con responsabilidad y rigor. Solo así podremos aspirar a un San Lorenzo más ordenado, de lo contrario estaríamos cerca de otra fuente de corrupción.