Las alergias respiratorias se complican cada vez más debido a las alteraciones climáticas, según explicó la Prof. Dra. Susana Repka, jefa de la Unidad de Alergia, Asma e Inmunología del Hospital de Clínicas de la FCMUNA.
Cambios bruscos de temperatura, contaminación ambiental y el efecto invernadero son algunos de los factores que influyen en el aumento de los síntomas alérgicos.
«El viento, la humedad y la temperatura son solo algunos de los parámetros climáticos que afectan a los pacientes alérgicos», afirma la Dra. Repka. «Cuando hay cambios bruscos, las mucosas respiratorias se inflaman y se vuelven más sensibles a los alérgenos«.
La contaminación ambiental también juega un papel importante, ya que aumenta la concentración de polen, hongos y otros alérgenos en el aire. «El efecto invernadero, además, modifica los periodos de polinización, adelantándolos o prolongándolos«, lo que agrava la situación de los pacientes alérgicos.
En el interior de las casas también hay que tomar medidas, como evitar fumar, prender braseros o chimeneas, y limpiar el polvo con un trapo húmedo. Los filtros de aire HEPA son recomendables para eliminar las partículas alérgenas del ambiente.
Recomendaciones para pacientes alérgicos:
- No abandonar el tratamiento de mantenimiento.
- Estar al día con las vacunas contra la influenza y el COVID-19.
- Tomar medidas para reducir la exposición a alérgenos en el hogar y en el exterior.
- No automedicarse ante la aparición de síntomas.
- Consultar con un alergólogo si los síntomas son graves o persistentes.
La Dra. Repka también insistió en la importancia de la prevención: «Es fundamental conocer los alérgenos a los que uno es sensible y tomar medidas para evitarlos«.
Con un poco de cuidado, los pacientes alérgicos pueden disfrutar de una mejor calidad de vida, incluso en un entorno cambiante.
Fuente: Dpto. de Comunicación Social de la FCMUNA