Un aspecto que papá y mamá no deben descuidar para el inicio del año escolar es que sus hijos vayan a clases con un buen calzado. Al respecto, brinda algunos consejos la podóloga asistencial, Zully Villalba, docente en el Área Terapéutica de la Carrera de Podología de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Asunción y el Hospital de Clínicas.

La podóloga destacó que es muy importante contar con un buen calzado, porque el pie debe asegurar el correcto funcionamiento de las articulaciones, de los tendones, de todas las funciones motoras que debe cumplir el pie. Por esta razón debe ser completamente funcional el calzado.

“Se debe entender que el pie es el que soporta todo nuestro peso, además de ser el centro de gravedad, por lo que deberíamos asegurarnos de que el calzado sea confortable. Un buen calzado es aquel donde nuestros pies se sientan sin ninguna presión, para evitar deformaciones óseas o para asegurarnos de que no exista alguna anomalía en la pisada, ya que esto puede repercutir en problemas de desviaciones de la columna, procesos inflamatorios de los pies, etcétera”, resaltó.

Detalló que las características que debe reunir un buen calzado para los niños y los adolescentes que están volviendo al colegio tiene que ser flexible, que tenga un ajuste suave, ya sea con cierre de velcro o con cordones. Respecto a la suela, puntualizó que tiene que tener al menos 3 centímetros a fin de amortiguar el impacto al caminar, no rígida, plana, ligera, resistente.

Otras características que debe tener el calzado es que debe ser de un material respirable, de cuero preferentemente. La punta debe ser ancha, redondeada, para que no haya ningún tipo de fricción entre los dedos que pueda causar alguna lesión como ampollosas o deformaciones en los dedos a los niños.

Además, tiene que tener un contrafuerte resistente, un  talón bien reforzado y que permita tener una buena estabilidad del tobillo. Resaltó que los calzados no tienen que heredarse, porque cada niño tiene una pisada distinta, por lo tanto, el desgaste va a ser distinto, por lo que recomienda que el zapato sea nuevo.

“Recomendamos que el calzado sea nuevo para el niño, ya que este se va a ir adaptando a la forma de su pie y a su pisada. En el caso de que el niño tenga alguna anomalía para pisar, entonces sí nosotros le heredamos un calzado entonces le vamos a estar causando problemas a la hora de la marcha de la locomoción”, dijo.

Por otro lado, mencionó que las medias son muy importantes también a la hora de acompañar al calzado, ya que protegen de las agresiones que puedan causarnos estos, en especial cuando son nuevos. Añadió que las medidas tienen que ser suaves, cómodas, no apretadas, capaces de absorber el sudor y ser antideslizantes.

Instó a elegir preferentemente las fibras orgánicas como el algodón o la lana, obviamente dependiendo de la estación del año.  “Tenemos que saber que cada calcetín debe ser de acuerdo al calzado que vamos a utilizar, en el caso de aquellos que sean de vestir optaremos por medias un poco más ligeras y más finas, pero de algodón para que sean capaces de absorber el sudor. No se recomiendan las medias de poliéster en ningún caso ya que no absorben la sudoración y esto podría causar hongos en los pies”, informó.

Fuente: Dpto. de Comunicación Social de la FCMUNA