Estamos atravesando días de intenso calor con temperaturas cuya sensación térmica sobrepasa los 42°C, por lo que desde la Facultad de Ciencias Médicas de la UNA, alertan sobre los cuidados a tener en cuenta en casos de exposición prolongada a altas temperaturas o al sol.
El golpe de calor ocurre por el aumento de la temperatura corporal que alcanza niveles superiores a los 40°C, haciendo que los mecanismos reguladores del calor queden superados, produciendo fallas en el organismo y entren en shock, por lo que la atención debe ser rápida.
Entre los síntomas más comunes que esto ocasiona se pueden citar temperatura corporal elevada, dolor de cabeza, mareos, presión baja, desorientación, convulsiones y alucinaciones.
Para su tratamiento, lo primero que se debe hacer es llevar a la persona afectada al aire libre, con sombra y pudiendo sacar todo lo que tenga contacto con la piel, posterior a eso se le aplica agua fría por la piel, buscando estimular el sudor.
Otras técnicas que pueden emplearse son: colocar bolsas de hielo en cuello, ingle y axilas, a menudo son necesarios líquidos intravenosos, requiriendo de una asistencia médica de emergencia.
Fuente: Dpto. de Comunicación de la FCMUNA