El Dr. Raúl Tornaco, especialista de la Cátedra y Servicio de Otorrinolaringología del Hospital de Clínicas de la FCMUNA, refirió que los cuadros de faringitis están entre las afecciones de mayor demanda de atención en el servicio. Explicó que se manifiesta de dos maneras, viral y bacteriana; y su principal característica es el dolor y malestar de la garganta.
“Debemos diferenciar la faringitis de la faringoamigdalitis; esta última es dada por una infección bacteriana, en cambio la faringitis está asociada a los cuadros virales o cuadros inflamatorios, que no necesariamente tengan que ver con una infección de las vías superiores; también se dan en el contexto de una enfermedad sistémica; pero la mayoría de las veces se da por un virus”, indicó.
La mayoría de los dolores de garganta son causados por resfriados, gripe o virus Coxsackie; que causa la inflamación de la garganta; cuando el origen es bacteriano se presenta con fiebre alta, y el tratamiento se da con antibióticos; en casos virales, tiende a presentarse febrícula, y se trata con medicamentos que disipan los malestares que causa.
Automedicación
La automedicación es tan común cuando se presentan cuadros respiratorios, acudiendo a las medicinas de venta libre. Ante este contexto, insta a acudir al especialista, a fin de brindar el tratamiento adecuado, dependiendo del cuadro.
“Se debe evitar la automedicación; y en estos casos tener cuidado, más todavía con los antibióticos; consumirlo cuando no es necesario puede crear resistencia y perder efecto en el momento que se requiera, ya no hará efecto al tratamiento; también para evitar los efectos secundarios que pueden dar, como diarreas y deshidrataciones, especialmente en los niños; por eso la consulta con el especialista es importante, será quien podrá indicar cuál es el tratamiento correspondiente”, explayó.
Prevención
Finalmente el profesional insta a seguir los métodos de prevención, como seguir los protocolos de higiene instaurados, el lavado de las manos, el uso de alcohol en gel y seguir utilizando el tapabocas. Ante síntomas de cuadros respiratorios, consultar con el médico y cumplir con el reposo correspondiente. En cuanto a los niños, evitar la exposición innecesaria en lugares de aglomeración y de frío. Protegerlos en lo posible. Y acompañar a todo esto con la vacunación contra estos virus que generan enfermedades de proliferación masiva.
Fuente: Dpto. de Comunicación Social de la FCM-UNA