Por fin llegó el día de la destrucción de las máquinas tragamonedas que fueron incautadas hace un mes atrás. Si bien fueron solo 17 las que un tractor los hizo puré, esperamos desde nuestra página, que apenas sea un comienzo para ir llegando a las que siguen enviciando a criaturas, jóvenes y adultos en los 56 barrios de San Lorenzo.
Según pudimos averiguar, las visitas a los lugares donde se tienen ilegalmente a los “traganiños”, será de manera sorpresiva, ya que, por lo visto, dentro mismo del edificio de vidrio no solamente se encuentran “cornetas” que avisan de antemano para que los sinvergüenzas hagan desaparecer sus máquinas malditas, sino que habría dueños de las mismas, que tienen alguno que otro puesto de preponderancia en el cuadro municipal, cosa de asegurar el negocio.
Lo publicado en nuestra humilde página respecto a que un concejal que se ausentó en una de las sesiones ordinarias sin pedir permiso, tuvo sus “frutos” el pasado miércoles cuando el propio “honorable puahú” en cuestión confirmó que nuestras publicaciones no faltaron a la verdad ni un milímetro, porque el muy hábil edil que hizo piá, tuvo que decir que estuvo ausente.
El muy habilidoso concejal, que ahora quiere ser diputado, le bastaron muy pocos bla, bla, para convencer a los restantes 11 representantes del pueblo sanlorenzano, a que actúen de apañadores de la violación del reglamento interno que rige a los honorables del tercer cielo municipal. Uno se pregunta al final… ¿Estos Concejales a quienes representan? ¿al pueblo de esta ciudad o al violador de reglamentos y normativas?
Con el “logro” liderado por quien quiere ser diputado y el acompañamiento fiel de los 11 restantes honorables del tercer cielo, quedó abierto un buraco por donde la ilegalidad se podrá filtrar en las sesiones ordinarias. Cualquier Edil puede justificar su ausencia con un “no estuve en la sesión, pero si en ALGÚN lugar de la institución”. Es muy conveniente ¿verdad?
Dicen por ahí que los números del primer cuatrimestre de finanzas municipal no convenció a algunos concejales, pero que prefirieron hacerse los ñembota, esperando la aproximación de las elecciones nacionales. ¿Será que la idea es destapar -guaú- justo en los días cercanos de las elecciones?… ¿O sea, que la reacción por el interés comunitario y la ilegalidad de gestión, solo será coyuntural? Con esto no es difícil ser adivino en cómo se desarrollará el periodo restante; todos se volverán ciegos y mudos, cuando los billetes que deben ir para obras a favor del sufrido pueblo sanlorenzano, cambien de dirección y les vuelvan prósperos a los de siempre.