Sin detenerse a pensar ni por un momento en la cantidad de personas que padecen el vicio del juego –enfermedad denominada ludopatía-, usted concejal Osvaldo Gómez, propuso alegremente legalizar todas esas malditas máquinas tragamonedas que hace tiempo vienen siendo esparcidas por nuestra ciudad. Diabólicos aparatos ajenos a nuestra cultura y contrarios a los principios básicos de la educación de nuestros jóvenes y, que no solo llenan el centro de San Lorenzo, sino que también enferman hasta los últimos rincones de este municipio.

Usted, de quién –yo personalmente- me atrevo a dudar que haya leído alguna vez cualquier libro, y que por ende nunca ha sido visto apoyando una publicación sana o fundando una biblioteca pública, usted de quién no se conoce la prédica de valores culturales ni el fomento de la sana lectura… usted propone aumentar las recaudaciones municipales a costas de un aumento del vicio, el fomento a la pobreza, y el abuso de aquellas personas carentes de entendimiento.

Su intención es la de recaudar más en concepto de canon municipal, legalizando las tragamonedas mangovy (máquinas instaladas debajo de árboles de mango). Y dice eso cómodamente apoltronado en su kurul, bajo el fresco aire pagado por el pueblo y bebiendo la agüita mineral que compra con nuestra plata, porque no sabe que muchas personas que –por desesperación- gastan sus míseras monedas en estas trampas para bobos, solo les quedan los mangos del verano para ir a alimentarse.

Usted, que siempre se muestra tan creyente y tan rezador, ¿acaso llevará también el agua bendita de la Iglesia para bendecir estas chatarras del demonio? ¿Pedirá oración por estos locales de juego?

De ser aceptada esta propuesta, la municipalidad de nuestra ciudad CLAUDICARÁ a luchar contra las máquinas que ya causan estragos en familias sanlorenzanas. ¿Piensa usted que es un ACTO NOBLE Y PIADOSO dejar nuestra ciudad en manos de la mafia del juego, y lo que es peor… lucrar con ello?

Si la ordenanza 6/2020 “Explotación de juegos de azar” no puede ser considerada una ley justa, y mucho menos una ley buena… las modificaciones que usted “sugiere” la terminan de podrir aún más.

Según la ley vigente “Podrán habilitarse salas de juego de azar como mínimo contando con 10 máquinas de juego electrónico”. Pero eso, a usted no le basta: no alcanzan los negocios formales para satisfacer su ambición. No le basta la creciente cantidad de gente enviciada que hay en la ciudad. ¡No! Para usted “en caso de que se encuentren máquinas adjudicadas en pequeños negocios en menor cantidad establecidas las mismas deberán abonar el canon correspondiente por cada máquina habilitada”. (en negrita la propuesta de modificación realizada en plena sesión ordinaria).

Usted es del tipo de personas a quienes no importa el daño causado sino los resultados económicos.

Habiendo usted prometido al pueblo muchas cosas, demasiado pronto deja ver el grueso contraste entre los discursos, las mentiras y la realidad. 

• Usted le prometió a sus votantes TRABAJO, pero lo único que le interesa es el LUCRO por cualquier medio, aún en perjuicio de la comunidad,
• Usted prometió LIMPIAR LA CIUDAD pero en vez de eso la está llenando de uno de los peores vicios que existen: el juego,
• Usted prometió MEJORAR la producción, el comercio, la seguridad, (y hasta cosas que no están en sus manos…) y a cambio de ello a través de “inocentes” modificaciones de una ordenanza, San Lorenzo se podrá ver inundada de máquinas tragamonedas,
• El único comercio que está ofreciendo al pueblo es tirar su dinero en vez de invertirlo, y la única industria que usted pretende generar es la producción de máquinas que dañan a las personas.

El paraíso de la fabricación de las tragamonedas -su maravilloso proyecto- señor Gómez no solo legalizará las máquinas que podrán estar libres de toda restricción y en cualquier parte de la ciudad, sino que además convertirá a la ciudad universitaria… en el paraíso de la fabricación y ensamblaje de estos malditos artificios…claro que todo esto es en honor a la divina recaudación.

Para llevar en cuenta: Tal vez usted esté muy apurado con la idea de ganar plata y por eso SE LE OLVIDO que para modificar esos “inocentes” incisos, primero deberá modificar otros artículos como aquel que dice,  “las máquinas de juegos de azar no deberán ser visibles desde la vía pública, sino que deberán estar ocultas por mamparas o vidrios opacos”, sin embargo a juzgar por sus propias palabras, su ingenioso plan propone legalizar con el cobro de canon incluso a aquellas que tienen una o dos como, mientras que el trabajo de la municipalidad es sacar de circulación todas las que están en situación irregular.

¿O será que piensa también poner ventanas de blindex en las veredas, entre artículos de almacén y en los árboles?

Señor Gómez, creemos que las autoridades de la ciudad han sido elegidas para el progreso y para el desarrollo, y por si usted no está enterado, el progreso se logra con trabajo, esfuerzo, sacrificio y el día a día. No se progresa comprando billetes de lotería. No hay desarrollo dónde se fomenta el vicio y la corrupción. Así que póngase de acuerdo: o fomenta el trabajo o fomenta el vicio. O promueve el crecimiento, o sigue promoviendo la estupidez humana.

Si voy a serle honesto, no creo que usted entienda mucho de lo que estoy escribiendo. Cómo me va a entender a mí, si ni siquiera entiende a los que lo votaron.

Pero aún tengo esperanza en los demás concejales. Tengo esperanza en las mujeres de nuestra junta municipal que son madres e hijas, y por sobre todo mujeres paraguayas. Tengo también esperanza en los concejales jóvenes de nuestra junta, y en aquellos que acaban de asumir por primera vez su compromiso político con nuestro pueblo.

Y espero que esta barbaridad que – solo a usted, Osvaldo Gómez se le podía ocurrir-, espero y rezo, para que sea detenida a tiempo.

Daniel Vargas Telles