EL REY … DE LOS CARADURAS
Resulta que muchos creyeron que la salida del ex monarca sanlorenzano –su majestad KIÑOKIS I– ocurrió el día jueves 8 de julio. Si, salió de su oficina ese día. Y ese mismo día lo reemplazó KIÑOKIS II, pero ¿adivinen que? Su majestad, antes de salir, cobró su sueldito hasta el 31 de julio. O sea que se pagó a si mismo 23 días que nunca trabajó.
¿Y por qué no iba a pagarse a si mismo toda esa platita sin trabajar? Es lo más justo, teniendo en cuenta que durante meses y años le pagó jugosos salarios a gentuza que tampoco trabajó por la Municipalidad. ¿Por qué él –pobrecito- no iba a planillear también? Tanto pagaron a funcionarios fantasmas que ahora mismo, los funcionarios que si trabajan todos los días…no pueden cobrar porque no hay un centavo en caja.
Algo más llamativo aún. Si KIÑOKIS I cobró hasta el 31, y KIÑOKIS II empezó a cobrar desde el día que asumió (¿8 o 9?), las matemáticas nos dicen que tuvimos a dos intendentes cobrando sus jugososo zoquetes al mismo tiempo durante casi todo un mes. ¿Qué santo ára habrá sido ese día para que hagan semejante vito de plata ajena?
Mientras los dos intendentes cobraban sus justos salarios centenares de trabajadores contratados dejaron de cobrar una gran parte de su sueldo, porque el Rey saliente “se olvidó” de sus contratos, y el Rey entrante “no podía” pagarle los días que habían trabajado para el otro… Los pobres se joden siempre, chamigo. Mientras los otros…
¿LA LEY SOLO SIRVE PARA ROBAR?
Sin embargo hay que reconocer que KIÑOKIS I, es un tipo que sabe aplicar la ley: baste con decir que a todos los funcionarios se les descontó de sus sueldos –puntillosamente- una alta suma de dinero que corresponde a la Caja de Jubilados Municipales… pero esa enorme bolsa de plata NUNCA HABRÍA SIDO DEPOSITADA en ninguna caja (de jubilados). ¿Dónde está la plata? Pregúntenle a MANDRAKE el mago.
Asimismo, se aplicó estrictamente la ley a la hora de descontarle a los funcionarios contratados el IVA, otra enorme bolsa de dinero que nunca llegó a destino, y para colmo, a todos esos obreros –que encima ganan una miseria- les hicieron gastar al pedo en talonarios, contadores, eré eréa… y encima les robaron con la ley en la mano.
Aclaremos que este descarado asalto a los trabajadores no ha ocurrido en la selva amazónica, ni en el desierto de Kalahari, ni en alguna montaña de Afganistán… ¡Noooo! toda la matufia se hizo a plena luz del día, a media hora de viajes de los “tres palacios de Asunción”.
Nadie vio nada, nadie supo nada, nadie oyó nada, y eso que todo ocurrió, ocurre y seguirá ocurriendo –desgraciadamente- a menos de un kilómetro de oficinas de jueces y fiscales, a cuatro cuadras de las oficinas de “delitos económicos” de la Policía Nacional… y en el mismo edificio donde –PLACIDAMENTE- se encuentra durmiendo la contraloría general de la república. La junta municipal, por cierto, ¿para que está?
¿Y por qué decimos que KIÑOKIS I es un tipo que sabe aplicar la ley? Porque la usó muy bien para exigir, descontar, retener, cobrar, apretar… a la gente más indefensa y necesitada, pero a la hora de cumplir con lo que está escrito… dobló la ley bien chiquitita y se la guardó en el… no sabemos donde.
VIVIMOS EN UN ESTADO IMBÉCIL
Pero el descarado acarreo de plata no terminó ahí, después del corte administrativo que se hizo con el CAMBIO DE LOS KIÑOKIS, los muchachos descubrieron que faltaba un poquito de plata del préstamo que se había hecho para construir el famoso Pabellón de Contingencias. Apenamí faltaron ¡cien millones! de guarakas, que –supuestamente- se habrían ido extraviado antes del famoso jueves 8 de julio.
Simpático el amigo “alci”: él pidió la plata prestada (desde la Muni), él “se prestó” la plata (desde la cooperativa), y él se traspapeló los cien palos ¿O no fue el? Todo eso mientras se paseaba abrazado con “el jóven candidato” por las diferentes reparticiones prometiendo “progreso”, “transparencia” y “una mejor ciudad”.
Durante la sesión del pasado miércoles se denunció que TAMBIÉN se gastó plata de los Royaltíes de Itaipú y Yasyreta en cosas que la ley prohibe gastar. Con ello, la ciudad de San Lorenzo podría ser castigada durante años con el retiro de ese dinero que debe ser usado para obras públicas como calles y edificios. Esa plata bien usada, bastaba para hacer el famoso pabellón: sin necesidad de sobrefacturar y sin deber nada a nadie.
Porque estamos hablando de más de 11 mil millones de guaraníes en royaltíes (según la Ordenanza 42/2020) plata con la que se debieron hacer varios pabellones y varias plantas de oxígeno y muchas cosas más, al menos teniendo en cuenta lo que otras ciudades SI HICIERON con menos de la mitad de esa plata.
HISTORIA DE DOS CIUDADES
Mientras nosotros nos endeudamos hasta las pelotas por UN “Pabellón de Contingencia” y andamos BUSCANDO oxígeno para atender a los pacientes de UTI, la silenciosa municipalidad de Villa Elisa ya construyó TRES PABELLONES DE CONTINGENCIA, y además ya inauguró LA SEGUNDA PLANTA DE OXIGENO.
Y comparo – muy respetuosamente- a ambas ciudades, porque Villa Elisa tiene 82 mil habitantes y un presupuesto de poco más de 40 mil millones, mientras que nosotros 260 mil habitantes y un presupuesto de más de 130 mil millones. Dicho en otras palabras, somos tres veces más “grandes” que ellos y tres veces más “ricos” que ellos… pero ellos hacen cinco veces más obras –en salud- que nosotros los sanlorenzanos.
Como –casi seguramente- algún politiquillo resentido puede asegurar que “somos mentirosos”, nos apoyaremos en los titulares de otro conocido medio de prensa escrita y digital.
Pero volviendo a lo que se empieza a descubrir de la “administración Quiñonez”, resulta que ADEMAS se habrían cometido delitos administrativos en el área de la educación pública. De acuerdo a denuncias verbales y públicas, expresadas en la última sesión de la Junta Municipal TAMBIÉN se habría “metido mano” a FONACIDE.
En plena sesión ordinaria, ante las cámaras y grabadoras de la prensa local, y transmitido en vivo por la WEB, el concejal Nelson Peralta acusó al ex intendente Alcibíades Quiñonez de malversación y estafa. Mientras tanto los ex miembros de la vieja aplanadora legislativa en el colmo de desfachatéz asentían con la cabeza, como si ellos no supieran –o acabaran de descubrir- el escandaloso desfalco hecho a la ciudad.
NEGROS NUBARRONES EN EL HORIZONTE
Mientras tanto –dentro del funcionariado- los nervios comienzan a aflorar. Aquellos que les prometieron el oro y el moro, no están cumpliendo. Los están cagando incluso antes de las mismas elecciones generales. Les prometieron que tendrían sueldos dignos, y según parece no se cobrará por un buen tiempo… porque no hay plata.
Les prometieron que no les descontarían nada y les descontaron el IVA y encima se lo robaron antes que depositarlo. A los que no pagan IVA les robaron los aportes de la caja de jubilaciones, así que ni préstamos pueden ir a pedir, porque están en mora gracias a kiñokis y asociados.
En los enojados grupitos de gente sogue se corrían rumores de los más extraños, como “los concejales cobran y nosotros nada”, “los funcionarios del concejal fulano ya están cobrando y nosotros nada”, “los del primer anillo del senador…” y cosas como esas que nos hacen recordar el creciente enojo y los problemas de la “era Germán Villalba”.
Los más golpeados y engañados en la municipalidad siempre fueron los funcionarios de aseo urbano – aquellos a los que Quiñones les pagaba la “lealtad” con chorizos- quienes eran visitados por Kiñokis I y cierto candidato a Intendente “Que no tiene nada que ver con la Municipalidad de San Lorenzo, y… no quiere saber nada del ex…”
Podridos de trabajar sin cobrar, y que encima les hagan descuentos, se manifestaron exigiendo sus miserables salarios. Se escuchó una frase muy simpática durante los reclamos: “Acá siempre cobran primero a los concejales, directores, y las “polleritas” de los políticos y luego, si sobra algo, se les tira a los trabajadores…”
Apenas terminó la manifestación, cierto concejal pachanguero se habría ido hasta aseo urbano a rogarle a los trabajadores “que se tranquilizaran” porque ellos serían los primeros que cobrarían el sueldo el día jueves 9 de setiembre. Y ante el reclamo de los enojados funcionarios (a los que les descontaron 350 mil por cabeza) prometió además que “apenas salga un nuevo préstamo de 2500 millones”, se le devolvería esa plata.
La pregunta es ¿seguirán sacando un préstamo multimillonario cada mes para pagar lo que ya se robo? ¿O es nomás bolaterápia para ganar tiempo engañando otra vez a “su gente”? Y una pregunta más ¿Quién realmente querría prestar 2500 millones a un municipio quebrado y endeudado, que cuando alguien va a cobrar o a reclamar, le pegan un portazo en las narices?
Asi están las cosas dentro de la Municipalidad de San Lorenzo, ¿Y afuera? Bueno, afuera el desastre es tal, que solo describirlo llevaría varios días. Y ni siquiera llegan todavía las elecciones… imagínense lo que será después. Cuando tengamos que aguantar los largos años de una municipalidad endeudada, sin plata, en medio de una ciudad con la infraestructura colapsada. Agréguele a eso el probable corte de los fondos de ROYALTÍES y del FONACIDE, y tendremos el panorama completo del futuro.
Si esto sigue así, tengo la sospecha de que muchas industrias y comercios de la ciudad empezarán a poner cartelitos en sus vidrieras: CERRADO. NOS MUDAMOS A VILLA ELISA.