El ciudadano Derlis Carmelo Peralta, denuncia que en su casa ubicada en la calle Nilo Meyer y Panchito López de San Lorenzo desde hace más de una semana no cuenta con el servicio de agua potable pese a que recurrió a la Defensoría del Pueblo pero en la ESSAP dicen que su conexión fue clandestina (aunque en octubre de 2019 fueron los propios funcionarios del ente para realizar la conexión a pedido de Peralta) y por otro la empresa privada Aguas de San Lorenzo sostiene que no tienen permiso para romper el asfalto.

Peralta manifestó a nuestra página que es urgente se le provea del vital líquido ya que en su casa le tiene a su madre que es de la tercera edad, así como también a un bebé que nació hace días.  

Según el afectado, en octubre del 2019 fue a solicitar la conexión de agua a la ESSAP y que estos accedieron a la conexión del servicio sin ningún reparo, con el correr del tiempo varias veces se apersonó hasta la oficina del ente estatal para pagar por el servicio pero que los funcionarios le dijeron que sus datos no existen y que siga usando el agua hasta solucionarse la dificultad, luego el 9 de febrero de este año llegaron funcionarios de la ESSAP y procedieron a cortar el suministro por una supuesta situación irregular (conexión clandestina).

El caso le hizo llegar a la Defensoría del Pueblo donde accedieron a realizar una nota dirigida a la ESSAP como a la Aguatera Aguas de San Lorenzo para que hagan la conexión. Sin embargo, pese a que la propia ESSAP realizó la conexión en el 2019, ahora consideran que fue clandestina, por otro lado Aguas de San Lorenzo se niega a realizar la conexión alegando que no tiene permiso para romper el asfalto.

Este caso, por un lado, desnuda el sistema precario que tiene la ESSAP en el registro de trabajos y usuarios, además el desinterés de sus autoridades para dar respuesta rápida y valedera ante una situación de urgencia para la familia en esta época de calor y de pandemia. Por otro lado, se deja ver la falta total de interés de la gente del Ente Regulador del Servicio Sanitario (ERSSAN), que pese a que la Defensoría del Pueblo pidió pronta solución, los días pasan y no se avizora la reacción esperada del ente que debería defender también los derechos del consumidor del vital líquido.