A simple vista pueden parecer muy similares, pero tienen algunas diferencias importantes. Las aplicaciones recopilan diferentes cantidades de datos de sus usuarios y tienen distintos métodos para proteger los mensajes. (Esta información fue publicada en elnacional.com, que a su vez se basó en el diario BBC News Mundo).
Mientras Signal y Telegram registran cifras récord de usuarios nuevos, WhatsApp se encuentra en el centro de la crítica por el cambio de sus términos de uso y privacidad.
La aplicación de mensajería anunció la anterior semana que compartirá diferentes datos de sus usuarios con su empresa matriz Facebook, y que esta podrá hacer lo propio con sus plataformas Instagram y Messenger.
En medio de los cuestionamientos, WhatsApp sostiene que sus nuevas condiciones, que deberán ser aceptadas por los que la usan hasta el 8 de febrero, fueron malinterpretadas.
“Queremos aclarar que la actualización de la política no afecta de ninguna manera la privacidad de los mensajes que los usuarios comparten con sus amigos y familiares”, señaló la plataforma en un comunicado emitido el lunes.
Añade que algunos de los cuestionamientos realizados son “rumores”.
Pese a esos argumentos, el largo debate respecto a qué servicio de mensajería instantánea es más seguro, se reavivó desde el cambio en WhatsApp.
Y aunque pueden parecer similares a simple vista, las tres aplicaciones tienen algunas diferencias importantes que analizamos acá.
Los datos recopilados
Lo primero que hay que saber es que, entre las tres plataformas de mensajería de las que más se habla en los últimos días, existen niveles distintos de datos que son recopilados.
Y es un asunto central porque esa es la información que WhatsApp puede compartir con Facebook y las otras aplicaciones que esa compañía posee.
“WhatsApp posee muchos metadatos, que es la información que se obtiene de cualquier mensaje que enviamos, como la marca del teléfono, la hora del mensaje, tu ubicación y otros. Con ello puede saber mucho de sus usuarios”, explica Cristian León, responsable del programa de innovación de la organización civil Asuntos del Sur, con sede en Argentina.
El experto en derechos digitales le indica a BBC Mundo que esta aplicación de mensajería, que es la más popular en el mundo, tiene un código de programación cerrado y por ello tiene poca transparencia sobre lo que recopila.
En la página web de WhatsApp están detallados los datos que obtiene y la información que una persona le brinda al aceptar sus términos de uso. Además del nombre, número de teléfono y contactos, están detalles del uso de la plataforma (tiempo o rendimiento, por ejemplo), transacciones desde la aplicación, marca y modelo del dispositivo o tipo de conexión, entre otros.
Telegram y Signal, explican León, recopilan mucho menos datos.
Signal, que tiene menos usuarios que las dos anteriores, por ahora no fue señalada de ser usado como un canal para captar reclutas o difundir información mentirosa.
Sin embargo, sí se vio en medio de algunas controversias políticas como cuando se denunció que era la aplicación que el expresidente del gobierno regional de Cataluña Carles Puigdemont usaba para comunicarse con uno de sus aliados durante su intento de declarar la independencia de esa región.