A continuación les presentamos las nuevas opciones de voto que se presentan para las próximas elecciones, en razón de las serias y prometedoras propuestas de los canditatos más tradicionales y conservadores de nuestra política ciudadana.
- Voto Pluma. Son aquellos votantes que van a regalarle otros cinco años de VIDA FÁCIL a aquellos “nobles políticos” que una vez le obsequiaron una “bolsa de pollos”.
- Voto Verde. Son aquellos que van a votar por el candidato que les prometió la plaza, inauguró la plaza, gastó millones en la plaza… pero en vez de plaza siguen teniendo el mismo yuyal, la misma oscuridad y los mismos chanchos morfándose la basura.
- Voto Garaje. Son aquellos electores que van a votar por un político que le “consiguió” una beca de estudio en una universidad privada, que jamás estuvo reconocida, donde jamás pudiste conseguir tu título, pero donde igual te sacaron plata.
- Voto Hervido. Son aquellos ciudadanos que van a votar por el candidato que les invitó a comer “pancho”.
- Voto Celestial. Son los votantes que van a elegir al candidato que les regaló el cajón para el finado. (El regalo no incluía la atención médica, ni los medicamentos, ni la ambulancia, ni el cortejo fúnebre).
- Voto Payaso. Es cuándo votas por el candidato más feo, más burro, y que menos te gusta, con la esperanza de que sea distinto de los anteriores. Y resulta que es aún peor.
- Voto Limosna. Es cuando entregás tu cédula por unas monedas, para que otro pueda ganar 30 palos por mes, sin contar los “otros beneficios” que él recibe y tu familia no.
- Voto Vital. Es cuando alguien se “mata” trabajando y ponderando por un candidato, que después tiene cinco años para darse la gran vida.
- Voto Rally. Es cuando tu candidato te hace patear por toda la ciudad para conseguirle votos, y al final lo único que te quedan son zapatos rotos y callos en los pies, mientras el pasa por tu casa a toda bala con su “todoterreno”.
- Voto Laboral. Son aquellos electores que votan a un candidato, porque les prometió trabajo, y después de la victoria: a) no te dan trabajo, o, b) te hacen laburar un par de meses, pero jamás cobrás.
- Voto Bus. Son los electores que votan por el “amable candidato” que los llevó en ómnibus hasta el local de votación. Lo que no saben es que seguirá comprando más buses con la plata que volverá a robar de la municipalidad.
- Voto Educativo. Es cuando después de las elecciones aprendés que desperdiciaste la única oportunidad que tendrás hasta dentro de cinco largos años.
- Voto Familiar. Es cuando el candidato te dice, todo el tiempo, “mi hijo”, “che papá”, “mi cuate” o “mi hermano”, hasta que le haces ganar. Y después lo único que escuchás es “el número que usted ha marcado, no existe o ha sido cambiado”.
- Voto Promesa: es el estilo más tradicional (por eso viene en verso)…
“Prometer, prometer hasta meter,
Y una vez METIDO, nada de lo prometido…”
Estamos seguros que la creatividad de los políticos no termina con esto. Así que pronto habrá más novedades.