La Lic. Claudia Bernaola, Jefe de Dpto. de Rehabilitación de Lesiones Músculo esqueléticas del Dpto. de Kinesiología y Fisioterapia del Hospital de Clínicas, recomendó la realización de ejercicios físicos regulares a los adultos mayores, a fin de mantener la vitalidad en músculos, y la funcionalidad en cuanto al movimiento y desplazamiento; además de ser una de las claves para un envejecimiento saludable.
“Con el pasar de los años, las personas en general van perdiendo masa muscular y fuerza, con ello se alteran los patrones de movimientos normales, comprometiendo así la independencia y funcionalidad en las actividades diarias. A ello, puede adicionarse diversas afecciones articulares propias de la edad, como la artrosis, artritis, osteoporosis entre otras”; comenzó explicando la Kinesióloga.
Para enfrentar el proceso de envejecimiento, y mitigar los cambios que se van presentando, se recomienda una rutina de ejercicios activo, libre y continúo; que vaya tornándose una rutina.
“El mismo, debe practicarse en forma regular y progresiva con una intensidad que no supere los límites funcionales de cada persona. Lo importante es que antes de iniciar un plan de trabajo activo, se debe acudir a las consultas médicas correspondientes, a fin de determinar si el adulto mayor se encuentra en condiciones cardiovasculares y osteoarticulares aptas para el tipo de ejercicio a realizar”; dijo la Lic. Bernaola.
“La rutina se debe iniciar con una serie de ejercicios de movilidad lenta y suave que involucre a las diferentes articulaciones a modo de calentamiento, seguido de una serie de ejercicios de fortalecimiento de músculos claves de zonas como cadera, rodillas, hombros.
Cada uno de ellos será adecuado a cada persona en particular y se irán modificando en función a los logros obtenidos. Para finalizar cualquier actividad, se deben incluir ejercicios de estiramiento suave y equilibrio”, amplió la profesional.
Así mismo recomiendan que las actividades sean planificadas y controladas por un profesional competente en el área, y se lleve a cabo como mínimo tres veces por semana, con ropa cómoda y calzado seguro, en superficies estables que faciliten la ejecución de los mismos y brinde seguridad. Los ejercicios también pueden realizarse en grupos para mejorar la motivación y socialización, sin descuidar las condiciones individuales de cada adulto mayor.
Entre los beneficios que se pueden obtener con los ejercicios al aire libre, la Kinesiologa citó algunos:
- Mejora y logra mantenimiento de la movilidad articular y fuerza muscular.
- Disminuye el dolor si está presente.
- Mejora las reacciones posturales.
- Disminuye el riesgo de caídas.
- Incrementa la seguridad y confianza para el manejo cotidiano, y mantienen la autonomía del adulto mayor.
Finalmente, la Profesional insistió en que todo plan de ejercicios debe brindar información clara, sencilla y orientativa al adulto mayor acerca de las ventajas y múltiples beneficios que la actividad física regular puede traer a su vida.
Fuente: Dpto. de Comunicación Social UNA