No es nada raro que en tiempos de elecciones municipales los políticos sanlorenzanos de ideología izquierda aparezcan por las calles y en los distintos medios de información ofreciendo “propuestas revolucionarias” para salvar a la ciudad.
Lo curioso es que así como aparecen, también desaparecen del escenario político una vez sellada su suerte . Otros “ligan” alguna cuota de poder, y la propia derecha se encarga de hacerlos “invisibles” tras algunos puestos interesantes dentro de la estructura oficialista, mientras otros se llaman a silencio, ya sea por incompetentes o por ofrecimientos, tal vez invisibles como ellos mismos, en función de la cuota de poder a la que accedieron mediante “propuestas de cambio” hechas en la última elección municipal.
En San Lorenzo son varias las agrupaciones de izquierda que surgen en cada elección municipal. Algunos con candidatos propios y otros apoyados bajo la figura de concertación, entre ellos Pmás, Tekojojá, Partido Febrerista, Tekopehú, Participación Ciudadana, (algunos de éstos partidos a su vez integran, junto a otros, la concertación de partidos de izquierda y centro-izquierda del país denominada Frente Guasú).
De toda esta oferta de izquierda sanlorenzana, en las últimas elecciones municipales lograron ingresar como concejal municipal el febrerista Alfredo Lezcano, con la concertación Avanza San Lorenzo y Silvia Mendieta (que entró como concejala departamental con Avanza País, luego como edil de San Lorenzo, bajo la figura de la concertación Juntos Podemos).
Por un lado, los de Avanza San Lorenzo, ni bien empezó la nueva administración colorada liderada por Albino Ferrer, dieron la sorpresa al “aliarse” a la administración colorada, aceptando de inmediato que el ex candidato a intendente Joaquin Bonet sea el encargado de proyectar la mejor imagen del intendente, a través de la dirección de prensa de la Municipalidad de San Lorenzo. Esta “oferta” aceptada, deja dudas respecto al compromiso de contralor de ejecutivo municipal, que debería ejercer el edil Lezcano.
Por otro lado, la concejal Silvia Mendieta (Concertación Juntos Podemos), a seis meses de haber asumido su banca en la Junta Municipal, no demostró absolutamente nada interesante. Por el contrario, con su accionar se la puede percibir mucho más oficialista que opositora, y tanto su producción como concejal y su intervención en las sesiones de la Junta Municipal han sido prácticamente nulas, dejándola como “invisible” e incluso inservible para la comunidad.
En cuanto a los otros partidos de izquierda, que nunca logran más de 2 mil votos, pasan totalmente desapercibidos, al menos si hablamos de trabajo de campo. Para ser sinceros, algunos de ellos se “aburguesaron” optando por hacer oposición y reclamo solo desde las redes sociales.
¿Es esta la revolucionaria izquierda sanlorenzana?
Por: Daniel Vargas