Por Claudia Meaurio
Una serie de hechos se han ido sucediendo en estos 5 días de vigilia por parte de los estudiantes de la Universidad Nacional de Asunción. Situaciones que pueden ser decisivos para el caso de corrupción en la alta casa de estudios.
Ayer durante la marcha estudiantil, personas aprovecharon para el ingreso al Rectorado, según denuncias hechas por los propios universitarios que se percataron de ello.
Una de las sindicadas de haber intentado extraer los documentos, es la funcionaria María del Carmen Martínez. Entre uno de los papeles hallados figura el nombre de Alejandra Corrales, nuera del rector Froilán Peralta, ya que es esposa de Arturo Peralta Cogliolo.
El documento en cuestión es una resolución con fecha 13 de mayo de 2015, por el que se resuelve «Asignar a Alejandra Mariel Corrales Andraschko funciones en la Dirección de Contrataciones dependiente de la Dirección General de Administración y Finanzas de la Universidad Nacional de Asunción».
Alejandra Mariel Corrales, figura como funcionaria del Rectorado desde el 1 de febrero de 2015. El documento hallado estaba totalmente arrugado demostrando una abierta intención de destruir el mismo, para evitar que llegue a los fiscales que investigan las irregularidades cometidas
Así también, a tempranas horas de este viernes un equipo del Ministerio Público, encabezado por el fiscal Cristhian Ortiz, ingresó al Rectorado de la Universidad Nacional, en San Lorenzo, donde anoche se intentó una aparente “quema de archivos”.
Por su parte,el decano de la Facultad de Ingeniería, Isacio Vallejos, ayer se sumó a lo referido por el decano de Derecho, Antonio Fretes, al anunciar que puso a disposición su cargo, afirmando que tomó esa decisión si es la condición necesaria para que el rector Froilán Peralta renuncie, según lo señaló en contacto con Radio Monumental.
«Yo creo que la actitud del decano de Derecho es buena para la situación en que hoy se encuentra la universidad. Para que el doctor Peralta presente su renuncia, si es necesario poner a disposición el cargo, yo no tengo problema. La universidad requiere volver a la calma. Requiere que se hagan los procesos de control, de normalización», manifestó.
Ante la consulta de si recibió algún tipo de presión por parte de Froilán Peralta, tuvo una respuesta dudosa ya que afirmó: «Tengo entendido que no, que no se pusieron en contacto conmigo» púntualizó.