Seguramente oyó hablar en la calle o en alguna clase de historia sobre la famosa frase»Todos los caminos van a Roma». Si, y se remonta en la edad antigua, hace mas de 2015 años atrás. Esos caminos no eran de asfalto como ahora, eran calzadas de piedra, pero bien hechas, llamadas «vías» y algunos siguen como vestigios. Bueno, esos caminitos que eran las rutas romanas, siempre debian estar en buen estado y es que el gobierno se preocupaba en mantener el esplendor romano con sus vías para progresar hasta su caída en el 476 d.C.
Los romanos tenían dignidad, por eso quedaron en la historia, sus buenos caminos o vías fueron parte de la grandeza y de su constante desarrollo. Nosotros los sanlorenzanos o paraguayos que somos, somos nietos y herederos culturalmente hablando de los romanos, deberíamos tomar el ejemplo de nuestros ancestros. Pero nuestra realidad es otra: nuestras calles en pesimo estado. Fiel reflejo de nuestra falta de dignidad vial. Producto de la desidia tanto colectiva coml también de nuestras autoridades.
Los innumerables baches existentes son nuestras heridas abiertas, producto de nuestra desidia general y un mea culpa de los siete millones de paraguayos.
Me atrevo a decir que los baches son el reflejo de nuestras autoridades, querés saber como es nuestro intendente o ministro? Bien, fijate en los baches que hay. Cada bache es un hueco en la cabeza de nuestros gobernantes.
Además de no poseer digna estructura vial ni autopistas o viaductos que valgan la pena, es porque estamos sumisos en el profundo atraso y lejos de una merecida modernidad. Seguimos siendo lacayos de la corrupcion y del «peichante» y el «vai vai», con míseros parches que no curan nuestras venas viales…
Seguro los romanos se estarán revolcando en sus tumbas al ver nuestra falta de dignidad vial. Vayan afuera, en cualquier país y veran calles hermosas, con estructura vial, pasos a desniveles o viaductos, glorietas y rotondas, enlaces tréboles que explayan belleza vial y orden, vias rápidas y sobre todo calles y avenidas impecables, señalizadas y sin un bache… Trasmite seguridad y dignidad a aquello usuarios que tambien refleja el orgullo de tener un digno camino…
Vialmente hablando, me gustaría que tengamos conciencia de que debemos avanzar y modernizando sin olvidar nuestras raíces, con una sociedad conciente y honesta, que pueda trazar y ejecutar proyectos dignos de toda buena índole, buenos caminos para un verdadero y moderno nuevo rumbo, una vía que valga la pena, tal cual los romanos hacían para su gente y su dignidad. No le parece?