Cerca de las 13 horas de hoy, una estudiante del colegio Saturio Ríos, acompañada de otra compañera, fueron víctimas de un violento robo. El ladrón fue un joven quien subió al bus de la línea 6 interno de pasajeros que exhibiendo un puñal de mediano porte golpeó a ambas jóvenes para quitar el celular a una de ellas. Según las menores, el chofer pudo observar todo y sospechosamente no hizo nada, más bien paró para que el ladrón baje tranquilamente de su colectivo. Familiares de una de las víctimas se quejó del agente de la comisaría de San Lorenzo porque al hacer la denuncia no manifestaron tanto interés en lo ocurrido con las chicas.
AMBAS RECIBEN GOLPES POR PARTE DEL LADRÓN. Las jóvenes S.C y G.M (ambas de 17 años), se llevaron el susto de sus vidas, cuando cerca de las 13 horas de hoy en el interior del colectivo mencionado, un joven subió al colectivo y se dirigió directamente a donde estaban sentadas (ante-último asiento), agarrando a una de ellas de su cabello y amenazándole con un puñal de mediano porte pidiendole el celular, en eso, la otra compañera intentó defender a su amiga, pero el violento joven le dio puñetazos en la cabeza, luego volvió a amenazar a la dueña del celular que alcanzó a morderle en el brazo, entonces el ladrón pone al arma por los labios de una de sus víctimas y consigue arrebatar el celular para luego bajar del bus y huir.
Según una de las estudiantes un agente policial estaba en la calle y aunque pudo haberse alertado por los ruidos y movimiento que hubo dentro del vehículo, el uniformado hizo como si no se enterara de la situación.
SOSPECHOSAMENTE EL CHOFER TAMPOCO HIZO NADA Y MUY POR EL CONTRARIO PARÓ SU VEHÍCULO PARA QUE EL LADRÓN HUYERA TRANQUILAMENTE. Todo esto ocurrió ante la mirada de algunos pasajeros que no hicieron nada por abortar el asalto, e incluso según las jóvenes, a pesar de que el chofer estaba observando todo, no se inmutó ni en parar ni en acelerar la marcha del colectivo, más bien “sospechosamente” mantuvo la puerta trasera abierta y paró para que el malhechor baje tranquilamente de su vehículo.
DECEPCIONADA DE LA FORMA EN QUE LA COMISARÍA TOMÓ LA DENUNCIA. Liliana Molinas, hermana de una de las jóvenes, manifestó a Sanlorenzopy que cuando hicieron la denuncia en la Comisaría Primera de San Lorenzo, el agente que escribió el acta, no demostró mucho interés en el caso, ya que a pesar de que ambas jóvenes presentaban rastros de violencia el agente prefirió poner el caso como “hurto” y no como “hurto agravado” ya que el malhechor golpeó a ambas y dejó marcas en manos y labios de una de ellas. Tampoco ningún agente policial de la jefatura les invitó a subir en alguna patrullera para ir al lugar del hecho por si el agresor se encontraba por la zona.
ATENDIDAS EN EL COLEGIO. En primera instancia, las estudiantes fueron contenidas del susto en la sección Orientación y Psicología del CRESR, donde también llegaron personales especializados de la empresa de auxilio contratada por la institución educativa.