[box type=»shadow»] La insolación, como consecuencia de la excesiva exposición del cuerpo a la radiación solar, puede causar serios problemas de salud e incluso la muerte de la persona si no recibe tratamiento, siendo los más vulnerables los niños y niñas, los adultos mayores y las personas que trabajan al aire libre. [/box]La insolación es una forma potencialmente mortal y grave de enfermedad causada por la exposición al sol en jornadas de calor. La temperatura del cuerpo se eleva a 40 grados o más que es cuando el cuerpo experimenta cambios neurológicos, en algunos casos graves.
A estas altas temperaturas, las proteínas del cuerpo y las membranas que cubren las células del cuerpo, especialmente en el cerebro, comienzan a destruirse y a funcionar mal.
El calor extremo puede afectar los órganos internos y causar degradación de las células del músculo cardiaco y de los vasos sanguíneos, daño a los órganos internos y muerte.
El tratamiento para las insolaciones leves, moderadas y graves es el mismo, variando solamente la urgencia con la que se lo debe llevar al médico. Las indicaciones a seguir son las siguientes:
Colocar al insolado en un lugar fresco con la cabeza alta y boca arriba.
Poner compresas húmedas y frías en la frente.
Colocar paños fríos en todo su cuerpo si tiene fiebre.
Si no está quemado hacer masajes en las piernas y los brazos
Elevar sus pies y poner al insolado en lugares donde haya ventiladores o aires acondicionados o en su defecto en lugares donde haya sombra
Beber agua a temperatura ambiente de forma periódica. Se recomienda mezclar una cucharada de sal por litro de agua para reponer las sales perdidas.
Entre las precauciones a tomar se encuentran no darle a beber líquidos helados