Según la Dra Luz Quintana encargada de Salud Ocular del MSPyBS. “Un 50 ó 60 por ciento de la población en algún momento y sin darse cuenta, tuvo contacto con la enfermedad. El principal agente transmisor de la enfermedad es el gato, pero también pueden ser otros como el cerdo, perro, ratón y aves, advierte la profesional.
La toxoplasmosis puede ser adquirida de dos diferentes formas: vía oral o de forma congénita, y no de persona a persona, salvo en el caso de madre a hijo durante el embarazo. “Una persona puede adquirir la enfermedad por medio de la ingesta involuntaria de los quistes de este parásito, ya sea a través de agua y/o alimentos u utensilios contaminados, o carnes con mala cocción”.
Según Quintana, un 50 ó 60 por ciento de la población en algún momento y sin darse cuenta, tuvo contacto con la enfermedad.
Practicas de higiene para prevenir esta enfermedad
Señala que para prevenir la enfermedad, es importante realizar prácticas de higiene, principalmente a la hora de manipular y elaborar los alimentos. “Higienizarse bien las manos, lavar bien las frutas, las verduras y los utensilios que se van a utilizar para la cocción, son indispensables”, aconseja la profesional.
Explica que normalmente los gatos adquieren la toxoplasmosis cuando comen aves o ratones contaminados, éstos al defecar eliminan los protozoos, que luego entran en contacto con el agua, objetos y alimentos.
“Hay ocasiones en que la transmisión no es precisamente por falta de higiene, sino por problemas hídricos, incluso de agua corriente. En Brasil hubo casos de gatos con sus crías que estuvieron cerca de tanques de agua y éstos fueron contaminados, lo que indispuso a la mayoría de sus habitantes a través de consumo de esta agua”, observa la galena. Expone que el cloro no elimina a estos parásitos, sino únicamente unos filtros especiales.
Menciona que las manifestaciones o síntomas iniciales de la toxoplasmosis pueden ser leves: fiebre, falta de apetito, presencia de ganglios, decaimiento, sin llegar a la postración. “Estos síntomas que pasan muchas veces desapercibidos y curan solos”, señaló; sin embargo, en las personas inmunodeprimidas (con cáncer, leucemia o VIH/SIDA) y en las gestantes, las causas son más severas. La enfermedad puede afectar cualquier parte del organismo: cerebro, hígado, músculos, corazón y los ojos.
Como método de prevención, la especialista solicita a entidades encargadas de la distribución del agua, que se cuide que las zonas de tratamiento de este vital líquido estén libres de gatos, de modo a evitar su contaminación.
El tratamiento de la toxoplasmosis se realiza bajo vigilancia médica, por medio de fármacos muy potentes, contraindicados durante la gestación, ya que puede interrumpir el proceso de embarazo. En este sentido se recomienda a la mujer antes de planificar un embarazo, realizarse un chequeo médico y descartar así la posibilidad de una toxoplasmosis.
Para mayor información, contactar al 222-013, con la titular de Salud Ocular del MSP.